09 diciembre 2007

Los científicos mienten, el cambio climático no entraña riesgos

El calentamiento global entra dentro de los planes de Dios, que también provee una solución: el enfriamiento. A continuación expongo mis argumentos científicos:



Viendo el documento gráfico superior, elaborado íntegramente con imágenes tomadas desde satélite, es sencillo comprender por qué el hemisferio norte se calienta más que el sur y por qué el deshielo está afectando, sobre todo, al Polo Norte y a Groenlandia.
Hay escépticos del mundo académico que defienden que la voluntad divina en forma de calentamiento es superior a la emitida en forma de enfriamiento. No obstante, si observamos que Dios no se ha cambiado de ropa (al menos desde la primera imagen que se le conoce, tomada en el Paraíso Terrenal mientras preparaba una mezcla de barro y costilla) es de suponer que el aumento de la temperatura no se producirá de forma persistente en ningún punto del planeta (recordemos su gusto por la omnipresencia), quedando, en breve (quizá uno o dos años) compensada la temperatura final a consecuencia de la fusión efectiva entre ambas voluntades, la caliente y la fría, inequívocas ambas puesto que Dios les ha asignado los mismos colores que utilizamos para diferenciar el agua en los grifos.

6 comentarios:

J. dijo...

Un momento, ese mapa está mal...

América parece una salamanquesa de cola estrellada lista para devorar el mundo, cuando todo el mundo sabe que no es más que un águila imperial agarrando una manga pastelera.

Maximus dijo...

Me quedo mucho más tranquilo... Si ya sabía yo que a esos de la tele lo que les gusta es alarmar.

Laura dijo...

No me queda del todo claro... Según el preciso documento gráfico, ¿de dónde le sale la corriente fría a Dios?

El Ratoncito Pérez dijo...

Increible Google Earth!
Nunca había quitado tanto Zoom a la aplicación... lo que se llega a descubrir.

Anónimo dijo...

¡¡Anonadado estoy!!...veo frios donde yo irradio calor...pfff.

Anónimo dijo...

Por tu culpa ahora cada vez que voy al servicio y veo el color azul y rojo del grifo me viene a la cabeza Dios